A tanta humildad, tanto amor
“Nos ha enviado con un buen mensaje para los humildes,para sanar los corazones heridos, para anunciar a los desterrados su liberación, y a los presos su vuelta a la luz.” ISAÍAS 61, 1
Talleres de Oración y Vida
Costa Rica
Padre Ignacio Larrañaga
Las aguas tibias de la serenidad
Para el humilde no existe el ridículo
El hombre humilde respeta todo
El humilde no se avergüenza de sí ni se entristece
María Virgen
Desprendido de sí y de sus cosas
A tanta humildad, tanto amor
Saber callar en el momento oportuno
Pueda yo ser, como Tú, sensible y misericordioso
Para el humilde no existe el ridículo
El hombre humilde respeta todo
El humilde no se avergüenza de sí ni se entristece
María asume el Misterio en medio de una inmensa soledad
Aquí sólo entran los que nada tienen
Caminos de fe, humildad, pobreza
Desprendido de sí y de sus cosas, el corazón humilde entra en el seno profundo de la libertad
aceptar humilde y profundamente que el Señor sea Altísimo
¿Qué es más fuerte, preguntó Jesús, el fuego o el agua?
A tanta humildad, tanto amor